Polémica prisión domiciliaria

El juez correccional Gregor Joos otorgó el régimen de semilibertad a Francisco Javier Chávez, condenado a cuatro años de prisión por el homicidio culposo de tres jóvenes que fueron atropellados por un vehículo que manejaba sin licencia de conducir y en estado de ebriedad.

La decisión del juez generó fuerte descontento de los padres de Juan Enrique Schott, quien murió atropellado por Chávez, junto con sus amigos Max Yeuhen Tretyakov y Facundo Nehuen Marino. El cuarto integrante del grupo de amigos Jorge Arce sufrió lesiones graves.

El hecho ocurrió la noche del 25 de enero de 2011, cuando Chávez conducía un Fiat Spazio por la ruta nacional 40, en cercanías de El Bolsón, y embistió desde atrás a los jóvenes que caminaban por la banquina. El vehículo no llevaba luces y Chávez no tenía licencia de conducir ni seguro contra terceros. Además, tenía 2,1 gramos de alcohol en sangre.

Juan Schott y María Cristina, padres de Juan Enrique, criticaron la decisión del juez. "Nuestra pregunta caliente es si esta persona, que es joven, va a estar en las mismas condiciones de seguir manejando y atropellar a otra persona. Estamos protegiendo a la sociedad, nuestro trabajo siempre fue de prevenir sobre lo que es el alcohol al volante. Él jamás se arrepintió, nunca dio signos de sentirse mal por lo que hizo", sostuvieron ayer los padres en Radio Seis.

"Río Negro" accedió a la resolución del juez, que otorgó el beneficio previsto por la ley 24660, de ejecución de la pena, a Chávez porque ya cumplió la mitad de la condena en prisión, en un hecho inusual para condenados por homicidio culposo. Joos concedió la prisión domiciliaria a Chávez, porque tiene domicilio en el paraje Los Repollos, cerca de El Bolsón, donde no hay unidad de detención para alojar internos con régimen de salidas transitorias o de semilibertad.

Mientras estuvo detenido avanzó en sus estudios secundarios y su conducta fue muy buena. El juez valoró que es artesano y sostén familiar.