Tras las copiosas nevadas durante la jornada del jueves y de la helada posterior, que dejó amplios sectores de ruta como virtuales pistas de patinaje, se sucedieron los inconvenientes ruteros en la provincia del Chubut, tanto hacia el norte, por la ruta 3, como hacia el noroeste, por la ruta 26, lo que motivó una dura tarea del personal de Defensa Civil en procura de prestar auxilio a los ocupantes de una veintena de vehículos que quedaron varados, varios de ellos con chicos de corta edad.
Más allá de la angustiosa espera y de los accidentes ocurridos -los que afortunadamente no provocaron lesionados de importancia- recrudecía ayer la fuerte tormenta por un amplio frente de aire frío que se desplaza desde el sur y se recalcaba del riesgo que corren los propios conductores que terminan luego solicitando apoyo para paliar las diferentes situaciones que los coloca como protagonistas.
Desde Defensa Civil se remarcó que "se realizan llamados para averiguar el estado de rutas pero, a pesar de nuestros informes sobre lo peligroso de la situación, muchas de estas personas inician viaje, desobedeciendo totalmente las advertencias", lo que más allá de preocupar sobremanera al personal para auxiliar con prontitud pone de manifiesto una excesiva confianza en sus vehículos y en su capacidad de manejo o una irresponsabilidad por quienes llevan a bordo de sus autos.
Mientras ayer, durante buena parte de la jornada se mantenían las nevadas y posterior helada, lo que agravó la situación en Ferrays y Garayalde o en Pampa del Castillo y Cerro Dragón, el personal de auxilio debió pedir colaboración al solidario grupo de 4x4 para ayudar en la evacuación de varias familias, y también se pedía la intervención de la empresa Contreras, la que puso en operatividad una máquina vial como apoyo a la tarea de socorro.
De esta manera, fueron intensas las horas de trabajo para socorrer a una importante cantidad de gente que había quedado a la deriva en medio de la nieve, mientras se hacía "limpieza" utilizando sal en los sectores más conflictivos, hasta que con la anochecida, finalmente se decidió que no hacía falta un corte de circulación aunque se realizaba un expreso pedido de no circulación –salvo casos de extrema necesidad- y que, mientras dure la contingencia climática, se recomienda viajar a partir de las 9 de la mañana y hasta las 17 ó 18.
Fuente: Crónica
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